26.9.12

Cómo ha evolucionado mi experiencia con la Ed. Física

Me llamo Arantxa Candelas Galavis, tengo 22 años y estoy estudiando el grado de Educación Infantil desde hace dos años.
Mi experiencia en la asignatura de educación física, como a continuación veréis, ha ido evolucionando a lo largo de los años. 

El primer contacto que tuve con ella fue en preescolar, cuando tenía 4 años, pero no la llamábamos educación física, la llamábamos psicomotricidad. 
Realizábamos sesiones de 45 minutos, aproximadamente, dos veces por semana y todo se reducía a circuitos como por ejemplo: saltar con los pies juntos dentro de los aros, lanzar una pelota a una canasta, rodar por una colchoneta, arrastrarnos como una serpiente y/o subir un par de escalones...
Recuerdo esta etapa llena de tensión cada vez que llegaban estas sesiones, y todo lo que puedo hacer sobre esto son suposiciones; puede que no me viese demasiado madura o tuviese miedo de hacerlo mal o quien sabe que pasaría por mi cabeza. El caso es que no me gustaba demasiado ir a la sala de psicomotricidad.

Cuando pasé a primaria esta tensión disminuyó, aunque no llegó a desaparecer. En este periodo, en las clases de educación física aprendimos las reglas de juego de diferentes deportes (béisbol, baloncesto, atletismo...) además de realizar diferentes actividades como correr (dar vueltas al patio), saltar a la comba (un juego bastante popular entre las chicas de mi clase, los días que el profesor nos dejaba hacer juego libre), saltar aros, dar volteretas, hacer el pino, estiramientos... Y realizábamos juegos como el "balón prisionero" o el "come cocos". Pero seguía sin gustarme esta clase.

La cosa empeoró cuando empecé la ESO, ya que los profesores eran mas estrictos y nos hacían correr (algo que sigue sin gustarme) y nos calificaban. 
Pero a partir de 3º de ESO la cosa cambió. Con el cambio de profesora en esta asignatura mi concepción de la educación física fue a mejor, aunque correr (test de navette o test cooper) seguían sin gustarme. Esta nueva profesora, aunque era mucho mas estricta, nos enseñó nuevos deportes como: el baseball, colbol, badminton, voleibol... y pasó de ser un mal trago a ser una de las asignaturas que mas me gustaban.
Tanto me gustó, que en 2º de bachiller, donde la educación física es optativa, fue una de las asignaturas que elegí para terminar mi etapa en el instituto. En este curso hacíamos natación, tenis, atletismo y nos preparamos para las pruebas físicas que a algunos les tocaría realizar para seguir con su formación.

Así que, como veis, mi trayectoria personas alrededor de esta asignatura ha sido un va y ven de sensaciones positivas y negativas.

Arantxa Candelas Galavis

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada